LOS CUATRO VACÍOS DEL TAO

Cada vez que se mencionan los 4 Vacíos del Tao, las personas abren un poco más los ojos y se preparan como para recibir grandes lecciones de filosofía oriental, hablando quizás de la vida, la reencarnación y la inmortalidad. Bueno lo de las lecciones es cierto, pero en lo que respecta a la filosofía es donde está la sorpresa, ya que el asunto a tratar es mucho más cotidiano de lo que se cree. Para el Tao, el concepto de vacío nos exactamente como lo entendemos lo occidentales. Es sencillamente otro tipo de energía, otra dimensión, aunque estos "Vacíos" que vamos a analizar, para desconcierto de algunos, son más mundanos de lo esperado y en definitiva no son otros que: 1- El vacío de la cocina, 2- El vacío del estómago, 3- El vacío de la mente y 4- El vacío de la habitación. ¿Sorpresa? Sigamos, o mejor dicho comencemos con el primero:

EL VACIÓ DE LA COCINA. Para el Tao de la salud y la larga vida, la alimentación es un eje fundamental. La misma debe estar basada en un equilibrio entre el Yin y el Yang, que a nivel digestivo debe entenderse como la combinación ácida-alcalina, por lo que el estudio de la trofología, es decir el arte de la combinación adecuada de los alimentos es la clave. Por otra parte, para una mayor eficiencia en dicha digestión, los alimentos deben ser lo más biodegradables posible, o sea, alimentos naturales e integrales. Ésto, en definitiva quiere decir que en la cocina deben abundar los alimentos que se consuman prontamente, lo que significa que las despensas se vacíen con rapidez y sea necesario ir de nuevo a conseguir alimentos frescos. La cocina, al llevar este tipo de alimentación taoísta permanece vacía, libre de esos temibles alimentos refinados, enlatados y procesados que son capaces de durar meses y años (!) en las alacenas, consumándose el primer vacío.

EL VACIÓ DEL ESTOMAGO. Está en perfecta sintonía con el Vacío de la cocina. Al comer alimentos integrales, frutas y vegetales frescos, bien combinados a través del arte de la trofología, éstos serán rápidamente digeridos y nuestro estómago permanecerá vacío. La digestión es el proceso metabólico que más energía consume, por lo que lo mejor es hacerla corta y eficaz, de manera de dirigir la energía a procesos de realización y creación, y no a un proceso digestivo. Por supuesto, no comer entre comidas para mantener el estómago vacío, es una estrategia obvia en este manejo de energía. El ayuno, esa técnica depuradora y terapéutica, sería la expresión suprema del segundo vacío.

EL VACIÓ DE LA MENTE. Es sencillo de explicar, aunque quizás no tan fácil de practicar: Hay que mantener la mente libre de pensamientos basura y llevar una filosofía sencilla de vida. Escapar del afán consumista es la clave para esto y tener una actitud positiva con respecto a la vida y los demás, nos ayudará a crear este vacío de la mente. Librarse de angustias y preocupaciones harán de este "viaje" un pasaje más agradable y provechoso, cultivando este tercer vacío. La meditación wu wei, "estarse quieto sin hacer nada", sería la mejor expresión de este vacío.

EL VACIÓ DE LA HABITACIÓN. Es muy importante. Para las doctrinas orientales el descanso tiene el lugar que se merece, es decir, de relevancia. Dormir y descansar son vitales para recargar energías y afrontar la compleja vida moderna. Esa idea aberrante de dormir lo menos posible para trabajar al máximo y alcanzar el primer millón (De dólares, claro) es un exabrupto que ha destruido unas cuantas vidas, directa e indirectamente. ¡Hay que parar la máquina! (Mente) y recargar lo que necesite el cuerpo. Para ello una habitación sencilla y oscura es lo ideal, evitando perturbaciones y movimientos de energía. Lo que necesitamos es tranquilidad. Los colores de las paredes deben ser relajantes, no excitantes. Eso del televisor en la habitación, la computadora en la habitación, radio-relojs y cargadores de celulares en las mesitas de noche, lámparas alógenas, teléfonos, fax, la oficina en la habitación!!, Los niños en la habitación, las visitas y vida social en la habitación, los espejos en la habitación, comer en la habitación, etc., etc., etc. son un desastre para el pretendido descanso. Mientras más energía movamos en este sitio, peor será el descanso, peor será la salud, peor será la vida. La habitación debe ser exclusivamente para descansar y para la relación de la pareja. Así lograremos el vacío de la habitación, indispensable para el feng shui y la armonía general. En todo caso, alguna decoración discreta, recomendada para la salud y la prosperidad, según la Geoastrología , podría ser aceptada para mayor armonía. El Tao y el Feng Shui nos piden acción. Las cosas no nos llegarán solas, o quizás sí, pero si las hemos trabajado tendrán más mérito y más provecho. Podemos implementar algunos aspectos del Tao y el Feng Shui a nuestras vidas.

Fuente: Arq. Mikel Barriola